Un avance significativo para los pacientes con manchas de vino de Oporto está en el horizonte gracias al trabajo de un equipo de investigadores multidisciplinario de la Universidad de California, Irvine. La nueva técnica se basa en el uso de ultrasonidos guiados por fotoacústica, lo que potencialmente podría transformar el enfoque actual en el tratamiento de estas malformaciones vasculares.
Este enfoque revolucionario apunta a eliminar los problemas que surgen con los tratamientos con láser, como son la recidiva de la PWS debido a la supervivencia de capilares anormales profundos en el tejido y el riesgo de cicatrices cosméticas.
Un enfoque combinado para un tratamiento más eficaz
La metodología propuesta combina las ventajas del contraste óptico selectivo de los tratamientos con luz láser y la capacidad de penetración del ultrasonido. Se aprovecha la generación de ondas fotoacústicas a partir de la excitación de la lesión PWS por un láser. Estas ondas, al ser detectadas y revertidas temporalmente por transductores ultrasónicos, se enfocan con precisión en la región afectada, minimizando el impacto en los tejidos circundantes.
Simulaciones prometedoras
Mediante simulaciones bidimensionales y tridimensionales, los investigadores han demostrado la factibilidad del método. Se observó que los campos acústicos temporales revertidos convergen en la vasculatura objetivo, como se anticipó, reduciendo así el calentamiento de los tejidos vecinos.
La precisión es clave
Los resultados indican que una cobertura angular alta y una densidad de elementos del transductor son fundamentales para lograr una mejor convergencia del campo de ultrasonido en los vasos sanguíneos afectados. La investigación resalta que los transductores con una frecuencia central relativamente baja podrían ser preferibles, dado que los vasos sanguíneos de submilímetro producen señales fotoacústicas de alta frecuencia que son más susceptibles a la atenuación acústica.
A la espera de evaluación experimental
Aunque el concepto ha sido probado con éxito mediante simulaciones, la verificación experimental y la evaluación clínica son necesarias para establecer la eficacia del tratamiento de PWS con este método. Este será el enfoque de las investigaciones futuras.
Fuente: www.ncbi.nlm.nih.gov
Ver y consultar a centros