Una revisión realizada por el portal de NCBI Bookshelf en su libro de referencia StatPearls, ha arrojado luz sobre la Pityriasis Alba, una condición cutánea benigna cuya presencia es notable especialmente en la población infantil y adolescente.
Esta afección dermatológica se manifiesta típicamente con manchas poco definidas y de coloración más clara en la piel, comúnmente ubicadas en el rostro, brazos y la parte superior del tronco. Las lesiones, que suelen presentar una descamación ligera y en ocasiones picazón, son más evidentes en personas con tipos de piel más oscuros, creando un claro contraste.
De acuerdo con los expertos en dermatología, el proceso de despigmentación que caracteriza a la Pityriasis Alba se observa inicialmente con una leve rojez, evolucionando posteriormente a un estado hipopigmentado. La exposición al sol tiene la capacidad de hacer más notorios estos cambios, haciendo que alrededor de las manchas la piel adquiera un tono más oscuro, lo que suele preocupar a los pacientes o a los padres de niños afectados por su impacto estético.
La buena noticia es que la Pityriasis Alba muestra un curso espontáneo de resolución, donde la pigmentación de la piel retoma su estado normal paulatinamente. Este periodo de restauración varía desde meses hasta algunos años, aunque en la mayoría de los casos se resuelve en no más de un año. El tratamiento principal consiste en medidas de control como el uso de emolientes suaves y corticosteroides tópicos de baja potencia, además de brindar tranquilidad a los afectados con respecto a la naturaleza benigna de la afección.
Epidemiología y Aspectos Clínicos de la Pityriasis Alba
En los estudios realizados en Estados Unidos, se estima que hasta el 5% de la población infantil puede presentar esta condición, exhibiendo una prevalencia más alta en ciertas regiones como Egipto y Mali, donde los porcentajes ascienden a 18% y 20% respectivamente. Aunque se ha observado una predisposición en individuos con antecedentes de atopia, este trastorno cutáneo también se hace presente en niños sin dicho historial. La condición no demuestra preferencia estacional y, a menudo, se aprecia una leve predominancia masculina.
Enfoque Diagnóstico y Tratamiento
La Pityriasis Alba tiende a diagnosticarse con facilidad basado en la aparición de lesiones cutáneas en niños y jóvenes. El enfoque terapéutico suele ser conservador, destacando el uso de cremas emolientes y protectores solares para gestionar la piel propensa a la sequedad y proteger las áreas hipopigmentadas de la radiación ultravioleta, la cual podría intensificar la descamación. Aunque los resultados del tratamiento son generalizados excelentes, la recuperación puede ser progresiva y llevar varios meses o incluso años.
Exclusiones Diferenciales y Consideraciones Clínicas
Es crucial establecer un correcto diagnóstico diferencial ya que existen múltiples patologías cutáneas que pueden presentar características similares a la Pityriasis Alba. Por ejemplo, la vitiligo implica una pérdida total de la pigmentación y favorece lugares como el contorno de ojos y boca, mientras que la psoriasis se descarta por la ausencia de lesiones en los codos, rodillas y cuero cabelludo, así como por la ausencia de las escamas color salmón características de esta.
Fuente: www.ncbi.nlm.nih.gov
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